TransCulturality (TC): Estamos con Carlos Julio Moya Ortiz, uno de nuestros colaboradores y CEO de la Escuela Integrativa de Coaching y Psicología EICP School, autor del Enfoque Integrativo de Coaching y Psicología basado en evidencias (EICPbe). Una de las características de esta escuela es que su formación on line da la posibilidad a que personas de diferentes países formen parte de su formación.
Carlos: ¿En qué momento vuestra escuela decide abrazar la transculturalidad como parte de vuestro modelo?
Carlos Moya (CM): Muchísimas gracias TransCulturality (Psicología, Coaching y Cultura) por invitarme a formar parte de vuestros colaboradores, es todo un honor compartir saberes y experiencias con colegas y otros profesionales interesados en promover la transculturalidad como valor esencial en entornos iberoamericanos. La transculturalidad y nuestra escuela han sido inseparables desde nuestros orígenes. Empezamos en el año 2006 facilitando uno de nuestros programas “estrella” en la actualidad: el programa “MedyCo Acción Social” en Centros de Participación e Integración de Inmigrantes de la Comunidad de Madrid. Como su nombre sugiere, a este centro acudían personas de todas partes del mundo y desde allí, nos dimos cuenta de que para facilitar el coaching era necesario entender las distinciones culturales de personas provenientes de diferentes países.
TC: ¿Cómo hacéis para gestionar las diferencias culturales?
CM: En nuestra escuela tenemos la suerte de contar con participantes de todas partes del mundo, en particular de diferentes países de América Latina, Canadá, España e Italia. Las diferencias interculturales están presentes desde el momento en que los estudiantes nos contactan para solicitar información sobre nuestros cursos.
Después de doce ediciones ya hemos aprendido algunas lecciones. Por ejemplo, si un latinoamericano nos pide información somos muy cuidadosos con el trato que le facilitamos y nos aseguramos de que estas tres palabras formen parte de nuestro vocabulario: gracias, con gusto y por favor. En cambio, si se trata de un español, vamos más al grano y le facilitamos datos más concretos.
También notamos estas diferencias durante el proceso de formación y en el momento en que los estudiantes hacen sus practicas de coaching. En las clases, los latinoamericanos tienden a extenderse más. Antes de dar una respuesta hacen un pequeño resumen de lo que han entendido. A veces, estos comportamientos generan incomodidad en personas que prefieren respuestas concretas.
Asimismo, facilitamos un módulo específico sobre transculturalidad. De esta manera, nuestros participantes reciben una formación concreta para aprender a trabajar con clientes internacionales.
TC: ¿Cuáles son los principales desafíos a los que os enfrentáis al tratar con personas de diferentes culturas?
CM: Por un lado, uno de los desafíos de los participantes, es comprender las diferencias lingüísticas, los modismos, las expresiones coloquiales, las palabras nuevas, y los diferentes significados que tiene una misma palabra dependiendo de cada contexto y cada país. Y de otro lado, lo maravilloso es que se realiza un esfuerzo consciente para aprender a comunicarse entre compañeros y docentes de diferentes países. Este esfuerzo se ve recompensado por la integración que se produce y la mejora en las relaciones con los compañeros y compañeras de otros países. Algo no menos importante es que se construyen redes de apoyo y de trabajo. Al final de los cursos, tanto profesores como participantes se trasladan a Madrid para realizar la parte presencial de nuestro master, este año será del 4 al 6 de julio. Esto tiene como consecuencia que la transculturalidad que han venido experimentando de forma on line se concrete en un “estrechar manos” o con más frecuencia, un abrazo. Nuestros estudiantes viajan de unos países a otros, construyendo nuevas sinergias, tanto en su entorno como en otros entornos diferentes.
TC: ¿Cuál es el valor añadido de la formación que brinda la Escuela Integrativa de Coaching y Psicología y su modelo basado en evidencias?
La palabra “integrativa” es la clave de esta respuesta ya que en un contexto de aprendizaje internacional, lo que buscamos es integrar las diferentes maneras de ver el mundo desde un amplio abanico de escuelas de coaching y también, desde las nuevas tendencias de coaching que van surgiendo. En el caso de las diferentes escuelas de coaching tomamos en cuenta los postulados de la Escuela de Coaching Ontológico, conocida como Escuela Suramericana; los de la Escuela Norteamericana, y los de la Escuela Europea. En cuanto a las nuevas tendencias, incluimos en nuestra formación prácticas como el mindfulness, que como todos sabemos, es una metodología milenaria que se originó en oriente. Hoy en día, después de una serie de investigaciones que constatan la mejora en la calidad de vida de las personas que la practican, es aceptada en la cultura occidental. En otras palabras, lo que pretendemos es transmitir una visión integral del coaching que haga evidente la interdependencia que hay entre los modelos florecientes.
TC: Hablando de integrar… en algunos sectores hay una especie de “pique” entre el Coaching y la Psicología. En cambio, la EICP School y su modelo han sabido emparentarlas para que de forma conjunta produzcan mejores resultados en las personas, ¿qué nos puedes comentar sobre este tema?
CM: En efecto, tienes razón… ese posible pique entre el coaching y la psicología que ha habido y sigue existiendo en algunos sectores, tiene su origen en momentos históricos previos. Hay entornos en los que, de un lado se critica al coaching y en otros, se critica a la psicología. Desde mi perspectiva, las divisiones no llegan a un buen puerto. El modelo que nosotros trabajamos y desarrollamos desde la EICP School es el Enfoque Integrativo de Coaching y Psicología basado en evidencias. Nosotros integramos las diferentes escuelas de psicología de las que se han derivado fundamentos para el coaching. Esto se debe a que somos conscientes de que el coaching ha bebido de las fuentes de investigación científica de los diferentes enfoques de la psicología en los que de forma permanente, se habla del pensamiento, de la conducta, de la neurociencia y de las emociones que son dominios propios del estudio y comportamiento humano. Es decir que, estamos en el terreno de la psicología, con lo cual este es un aporte importante de la psicología como ciencia, aprovechado con mucha habilidad por el coaching que se caracteriza por ser una metodología ágil.
TC: La población en general no distingue entre los diferentes enfoques de la psicología…
CM: Así es. Desde la psicología, se han derivado diferentes corrientes y algunas se reconocen entre ellas y otras, no. Podemos citar entre estas: el Psicoanálisis, el Análisis Transaccional (AT), la Gestalt, la Terapia Breve Estratégica, etc. Lo que nosotros hacemos es honrar y poner en valor las investigaciones que se han hecho tanto desde el coaching como desde la psicología. Nuestro objetivo es integrar las diferentes corrientes de la psicología y las diferentes manifestaciones del coaching para crear un modelo estructurado, sistemático y altamente eficiente, absorbiendo al máximo lo mejor que se ha producido hasta el momento en el ámbito del comportamiento humano.
TC: ¿El coaching revaloriza a la psicología? ¿La psicología revaloriza al coaching? o ¿Existe una influencia positiva entre ambos?
CM: El coaching como un fenómeno posmoderno derivado precisamente de una sociedad que cada vez requiere de respuestas más ágiles, más prácticas, orientadas a resultados que desarrollen procesos de felicidad, bienestar, calidad de vida, etc., es propio de esta época y hace que efectivamente, evolucionen de alguna forma las nuevas líneas de trabajo que tienen que ver con el desarrollo humano y social o incluso la misma psicología.
Así es que, desde este punto de vista, la psicología frente al coaching, viene siendo un reclamo a la manera en cómo se ha venido haciendo psicología para que esta ciencia sea más práctica, más ágil y orientada a resultados positivos. Esta tendencia empezó a mitad del siglo pasado, con la Psicología Positiva en entornos de positividad, -valga la redundancia-.
Ahora se está hablando de una psicología que requiere menos tiempo. Y por supuesto, la psicología ha aportado las bases fundamentales para que el coaching exista. El coaching es eficiente gracias a todas las investigaciones que ha hecho la psicología sobre el ser humano.
De hecho, el coaching no existiría sin las investigaciones de la psicología en el ámbito del análisis y modificación de la conducta, de los estudios de la percepción de la corriente Gestalt de las emociones, del contexto del -aquí y el ahora- de la manera en que nacen las escuelas humanistas, los comunicólogos como Paul Watzlawick del Modelo de Palo Alto, la Terapia Familiar Sistémica, el Análisis Transaccional y la Terapia Breve Estratégica. Es decir que, en nuestra escuela si vemos con detalle todas estas corrientes de psicología. En cambio el coaching de otras escuelas no visibiliza tanta riqueza derivada de esta ciencia. El modelo EICPbe hace consciente y relevante el origen de todos estos desarrollos tecnológicos que provienen de diferentes corrientes de psicología que son adaptados a una metodología sistemática y practica, como el coaching.
TC: Carlos, te agradecemos muchísimo esta entrevista. Para TransCulturality (Psicología, Coaching y Cultura) es un honor que formes parte de nuestro equipo de colaboradores. Desde luego que esta solo es la primera entrevista que te haremos. ¡El tema da para mucho más! ¿Dónde podemos encontrar información sobre el Modelo EICPbe?
Muchísimas gracias TransCulturality por vuestra entrevista y por vuestro apoyo y asesoría en la impartición del módulo de coaching transcultural de nuestra escuela. Por mi parte encantado de seguir hablando sobre este apasionante tema. Podéis encontrar un resumen de nuestro modelo en nuestra página https://eicpschool.com/formacion/diplomado o bien en mi libro: Psicología y Coaching: hacia un enfoque integrativo, está disponible en versión kindle en Amazon.
Mercedes Valladares Pineda
Psicóloga Experta en Coaching TransCultural