Ya es hora de que eliminemos los estereotipos de nuestro vocabulario. En una sesión de coaching, una chica de Nigeria me comentó que está cansada de que la gente la trate como una africana salvaje, a pesar de que, tiene estudios universitarios y habla varios idiomas. Las latinoamericanas están agotadas de que las traten como bombas sexuales (doy fe de ello), y las asiáticas como sumisas.
Y tú, ¿disimulas determinados rasgos identitarios en tu trabajo con el fin de neutralizar los estereotipos que te adjudican por tu origen cultural?
La solución para erradicar los estereotipos, no radica en que tengas que modificar tu apariencia física, para dar una imagen diferente y evitar que la gente en tu trabajo, te trate de una u otra manera. Aunque disimules tus rasgos, si no perteneces a la cultura del país en el que vives, siempre serás diferente.
Algunos ejemplos
En Estados Unidos, las afroamericanas no se presentan a una entrevista o a un nuevo trabajo sin alisarse el pelo. Y, las asiáticas, se rizan el pelo para disimular sus rasgos orientales.
Así, las mujeres que llevan ropa étnica, son etiquetadas como tradicionales, poco modernas y conservadoras. Yo me compré un vestido étnico en Varsovia y cuando la gente me pregunta por el, alucinan con mi respuesta. ¿Te parecen estos estereotipos familiares?
Claves para superarlos
- Asume que los estereotipos que te adjudican no son tuyos, son de las personas que te rodean.
- Si te peinas, te arreglas o te vistes de determinada forma, que sea porque a ti te gusta, no para sentirte aceptada, ni para agradar a los demás.
- Puedes elegir, entre desmontar los estereotipos con explicaciones, o dejar que las personas te observen, y se den cuenta de que no encajas en las suposiciones que han hecho sobre ti.
- Pero sobre todo, nunca dejes de ser tu misma.
Mercedes Valladares Pineda
Psicóloga Experta en Coaching TransCultural