
Salud mental en el extranjero: ¿qué tan difícil puede ser adaptarse? Más de lo que imaginamos. Vivir fuera de tu país puede ser una experiencia transformadora, pero también muy exigente a nivel emocional. La sensación de aislamiento, la falta de redes de apoyo, la incertidumbre laboral o las diferencias culturales pueden desgastar incluso a personas resilientes.
Salud mental en el extranjero: un reto silencioso
La depresión es uno de los trastornos más comunes entre quienes viven fuera de su país. A menudo aparece de forma gradual, fruto de expectativas no cumplidas, rupturas afectivas o problemas de adaptación. Incluso las personas con empleos estables y buenos salarios pueden sentirse perdidas en un entorno que les resulta desconocido.
Muchas veces, quienes emigran ocultan sus emociones para demostrar que están “bien” y no preocupar a sus seres queridos. Pero eso sólo retrasa la búsqueda de apoyo y agrava el malestar. Como psicóloga transcultural, he acompañado a personas que se han sentido incomprendidas por profesionales que no comprendían su contexto migratorio.
Además, estudios como el de William Russell (2021) muestran que más de un tercio de los expatriados entrevistados afirmaron que su salud mental se deterioró durante la pandemia de COVID-19. Esta fragilidad no ha desaparecido, y aún hoy muchas personas siguen necesitando recursos para fortalecer su bienestar emocional.
La salud mental en el extranjero y las 7 estrategias para cuidarla
1. La salud mental en el extranjero precisa de una red de apoyo internacional
Conecta con personas de tu país, del lugar donde vives y de otras culturas. Una red diversa y abierta es tu colchón emocional cuando más lo necesitas. No subestimes el poder de una buena conversación con alguien que te comprende.
2. La salud mental en el extranjero está relacionada con los límites que estableces en el trabajo
Estar en el extranjero no significa estar disponible 24/7. Cuida tu tiempo. Asegúrate de reservar momentos para ti, para tus pasiones, tus descansos y tu crecimiento personal.
3. La salud mental en el extranjero prioriza el sueño y el ejercicio
Dormir bien y moverte cada día no es negociable. Ambos influyen directamente en tu salud mental. El cuerpo y la mente se retroalimentan, y mantenerlos activos y descansados es parte del autocuidado esencial.
4. La salud mental en el extranjero requiere de ayuda psicológica especializada
Busca profesionales que comprendan tu contexto migratorio. No todos lo hacen. En mi consulta, trabajo con personas como tú que necesitan ser escuchadas desde una mirada integradora y sin prejuicios.
5. La salud mental en el extranjero requiere el mismo cuidado que la salud física
Así como te haces revisiones médicas, también es válido pedir apoyo psicológico cuando lo necesites. Investiga opciones locales, digitales y gratuitas. Cuanto antes actúes, mejor.
6. La salud mental en el extranjero requiere de un equilibrio entre tu vida en el nuevo país y el uso de las redes sociales
Estar en contacto con tu país de origen es importante, pero también necesitas arraigarte en tu nuevo entorno. Busca grupos presenciales, actividades culturales o voluntariados que te conecten con personas reales.
7. La salud mental en el extranjero está relacionada con la gestión de tus expectativas y tu estado de ánimo
Aceptar que las cosas no siempre salen como esperabas es parte del camino. Reconocer tus emociones sin juzgarlas te ayuda a adaptarte con mayor flexibilidad.
¿Sientes que necesitas apoyo?
La salud mental en el extranjero es más vulnerable. No importa cuán fuerte seas, hay momentos en los que necesitamos una mano. Si estás atravesando un momento difícil, no estás solo/a.
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Acerca de la autora
Mercedes Valladares es psicóloga transcultural y experta en coaching para empresas. Acompaña a ejecutivos en el logro de sus metas mediante sesiones de psicología y coaching transcultural. Imparte formación presencial y online a equipos y organizaciones en procesos de desarrollo profesional, liderazgo, adaptación y comunicación intercultural. Trabaja con su método MOVERTE para ayudar a conseguir objetivos con propósito. Su modelo de trabajo se inspira en la Psicología Humanista y en el respeto a los Derechos Humanos