Hace aproximadamente un mes un amigo venezolano me dio los buenos días y las gracias en el whatsapp, por una información que yo le había enviado. Ese día iba corriendo a hacerme unos análisis médicos y simplemente le contesté: “Ok. Besos”. Mi sorpresa fue muy grande en el momento en que él me contestó: “Siempre hay que dar los saludos, al menos si te los dan”. Acto seguido le expliqué que iba de prisa y me disculpé.
Este incidente me hizo pensar sobre como son nuestras interacciones en el whatsapp y si la manera en cómo nos comportamos tiene que ver con la nacionalidad de la persona que escribe. Revisé los mensajes de todos mis contactos españoles y latinoamericanos. En el caso de los españoles, ninguno me daba los buenos días, las buenas tardes o las buenas noches. En el caso de los latinoamericanos, todos lo hacían. Los más escuetos al menos decían “hola”.
Comenté esta situación con algunos colegas psicólogos y ellos opinaron que estas interacciones son consecuencia de la hiperconectividad en la que vivimos. El hecho de estar permanentemente conectados, nos impide distinguir cuando fue la última vez que vimos a una persona. En otros casos, estamos tan ensimismados en nuestros problemas y en nuestras rutinas que nos olvidamos de cosas tan importantes como saludar. ¡A veces nos comportamos como autómatas!
Me di cuenta de que actuamos como si nuestras interacciones fuesen continuas y no dejáramos de ver a nuestros amigos, familiares o compañeros de trabajo. Observaba cada mensaje que recibía: “Chicas, solo tengo esto de las claves”, “¿Qué marca era el móvil?”, “Tenemos que preparar la ponencia para el Instituto de Empresa”, “¿Café?” etc. ¡Todo a secas, sin ningún tipo de aderezo y a cualquier hora del día! A veces mi cerebro tenía que rebobinar para entender el tema sobre el que me escribían.
Diferencias entre España y Latinoamérica
En mis mensajes de whatsapp los que menos saludan son las personas con las que más tengo contacto profesional. Aún así observo que aunque sean mis compañeros o amigos, los latinoamericanos son más propensos a saludar. ¡Y es que en Latinoamérica se valora mucho el buen trato!
Para los latinoamericanos los españoles son más directos y para los españoles, los latinoamericanos se “enrollan” más.
En la Asociación Internacional de Coaching y Psicología (AICP) trabajamos con muchos países de Latinoamérica. Una compañera española que estaba facilitando información a través de whatsapp a una colombiana, me dijo: “¡Qué rimbombantes son en Latinoamérica!”. Reaccioné de inmediato y le dije: “Por favor, cada vez que hables con alguien de Latinoamérica saluda”.
Cuando hablamos de interacciones entre latinoamericanos y españoles, hay que que tener en cuenta que los españoles perciben algunas frases rimbombantes porque en Latinoamérica se habla con mucha educación y se utilizan algunas fórmulas que pueden ser incomprendidas en España.
Por ejemplo, si eres español y alguien te pregunta: “¿cómo has amanecido?” te puedes sentir descolocado. Y es que esta expresión viene de la frase en inglés: “How did you sleep?” que literalmente se traduce: “¿Cómo has dormido?”. En otras palabras, con esta frase te están preguntando si has descansado bien. ¿La pillas ahora?
Asimismo, en Latinoamérica se utiliza un lenguaje más formal dentro del ámbito laboral. Otra cosa es la comunicación informal en un espacio más relajado. En algunos países, cuando te presentas a un sitio sin saludar, te dicen con un tono bromista: “¿Has pasado la noche conmigo? ¿Por qué no saludas?”
¿Las prisas en las que vivimos y la rutina son una excusa para no saludar?
Llevo un mes saludando a todos mis contactos de whatsapp. Reconozco que no ha sido una tarea fácil. En algunos casos, me he dirigido a las personas con una petición o una pregunta concreta y luego he tenido que recular y poner en la frase siguiente: “Por cierto, buenos días”.
Asocio esta experiencia con el mindfulness. En el mindfulness eres consciente de tu respiración y del momento presente. En este sentido, saludar ha significado para mí hacer una pausa y ser consciente de lo que estoy haciendo, qué y a quién le estoy escribiendo.
No estoy sugiriendo que saludemos las 24 horas del día, ¡eso si que sería rimbombante! Lo que planteo es que con independencia de nuestra cultura y nacionalidad, saludar al menos por la mañana y antes de cerrar algunos temas de trabajo por la noche, puede convertirse en un ejercicio que influye a mantener un estado de ánimo óptimo y positivo.
¡Feliz día amigos!
Mercedes Valladares Pineda
Psicóloga y Coach Transcultural
ACERCA DE LA AUTORA
MERCEDES VALLADARES PINEDA, trabaja en Madrid de forma presencial. Y a través de plataformas on line, a nivel internacional. Facilita procesos de coaching personal, de negocios y formación a medida “one on one” y para empresas. Utiliza la cultura y la psicología como dos herramientas que se retroalimentan mutuamente. Por ello, facilita procesos a personas que quieren adaptarse a diferentes culturas, aumentar su autoestima cultural y aprender a gestionar la ansiedad y el estrés cultural. Asimismo, ayuda a parejas mixtas a superar las barreras culturales que les dificultan su comunicación. Ha creado su propio modelo de trabajo inspirado en la psicología humanista y el respeto a los derechos humanos. Trabaja con expatriados, cooperantes internacionales, organismos internacionales y ONG, escuelas de negocios y universidades, diplomáticos, cónyuges de diplomáticos y expatriados y familias que necesitan orientación en una nueva cultura.