La autoestima cultural es la imagen que tenemos de nuestro propio país y de nuestra nacionalidad. Se desarrolla gradualmente a lo largo de nuestra vida, empezando en la niñez, en el momento en que escuchamos comentarios de nuestros padres y abuelos, quienes son los primeros en transmitirnos sentimientos y percepciones del lugar en que nacimos.
En el colegio, nos cuentan los hechos históricos desde diferentes perspectivas. En algunos países se transmite la idea de que sus ciudadanos han sido “explotados y víctimas” de algunas circunstancias.
En otros, los estudiantes aprenden que sus ciudadanos han sido los defensores de algunos derechos. Por ejemplo, en Estados Unidos, a los niños se les inculca el sentimiento de patriotismo que es mucho más exagerado que en otros países.
El papel que desempeña la educación es fundamental ya que a la vez que aprendemos nuestra historia nacional vamos adquiriendo sentimientos de confianza y orgullo hacia nuestro país o por el contrario, adoptamos sentimientos de menosprecio y resentimiento hacia otros países que consideramos perpetradores de crímenes y delitos de lesa humanidad.
Asimismo, la sociedad en la que crecemos tiene gran impacto en la formación de nuestra autoestima nacional que está influenciada por la manera en cómo nos ven o nos tratan los demás y cómo nos vemos y nos tratamos a nosotros mismos.
La calidad de las negociaciones de nuestros gobernantes o las noticias de la prensa internacional sobre nuestro país son indicadores claros de la percepción que se tiene sobre nosotros. Por otra parte, vemos el reflejo de lo que somos en las opiniones que escuchamos acerca de nuestra identidad, en los grupos en los que participamos y en los medios de comunicación nacionales.
Grados de la autoestima cultural
Autoestima muy baja: si tienes una autoestima cultural muy baja valoras poco a tu cultura, subrayas sus carencias y menoscabas sus virtudes y aspectos positivos. En otras palabras, ensalzas los valores, comportamientos y costumbres de otras culturas y subestimas las de tu propio país. Una baja autoestima cultural tiene como consecuencia la aparición de complejos culturales, la mala convivencia con tus compatriotas y el rechazo a tu país de origen. Algunos españoles piensan que el resto de los países europeos son mucho más desarrollados que España.
La autoestima cultural no solamente varía entre países sino también entre regiones de un mismo país. En algunos países latinoamericanos, desde algunos sectores de la sociedad las poblaciones indígenas son percibidas con inferioridad.
Autoestima saludable: si tienes una autoestima cultural sana te sientes orgulloso de tu país, aprecias sus valores, comportamientos y costumbres y al mismo tiempo eres consciente de que otras sociedades tienen distintas capacidades y han logrado desarrollarse más rápido en algunas áreas como la tecnología, economía, investigación y desarrollo, etc.
Autoestima excesivamente alta: si tienes una autoestima cultural demasiado alta consideras a tu país superior a otros países. Piensas que tus valores, comportamientos y costumbres son los mejores. Muchos españoles opinan que en España la calidad de vida es insuperable.
Pensar que España es menos desarrollada que el resto de los países europeos proviene del desconocimiento que tenemos de nuestros vecinos. Asimismo, pensar que en España se vive mejor que en cualquier otro sitio puede tratarse de un sesgo heurístico que no se corresponde con la realidad.
PASOS PARA TENER UNA AUTOESTIMA CULTURAL SALUDABLE
Si tienes la autoestima cultural muy baja:
– Analiza la percepción que tienes sobre tu país, no seas demasiado crítico y piensa en las cosas positivas del mismo.
– Indaga a través de un proceso de inmersión intracultural. Estudia la historia de tu país desde diferentes perspectivas y reconoce los aportes que ha hecho tu cultura a otras culturas.
Si tienes la autoestima cultural excesivamente alta:
– Reconoce que tus valores, costumbres y creencias no son universales.
– Acepta que cada país percibe al mundo de diferente manera. Tu país no es mejor, ni peor que otros, simplemente es diferente.
– Vive una temporada fuera de tu país y valora las cosas positivas de otras sociedades.
La autoestima cultural no es inamovible ya que la imagen que tenemos de nuestro país va cambiando a lo largo del tiempo dependiendo de su situación política, su crecimiento económico, nuestra evolución personal y nuestras propias experiencias.
Tener una autoestima cultural saludable y reconocer la diversidad contribuye a que aceptes los aspectos favorables y desfavorables de tu país, a potenciar sus virtudes, aprender de sus limitaciones para conseguir mayor bienestar emocional, crear tu identidad y sentirte orgulloso de tu país y de ti mismo.
RECORDAR DE DÓNDE VIENES Y QUIÉN ERES TE AYUDA A ADAPTARTE MEJOR A OTRA CULTURA
Mercedes Valladares Pineda
Psicóloga Experta en Coaching Transcultural
ACERCA DE LA AUTORA
MERCEDES VALLADARES PINEDA, trabaja en Madrid de forma presencial. Y, a través de plataformas on line, a nivel internacional. Facilita procesos de coaching personal, de negocios y formación a medida a empresas y «one to one» a individuos. Utiliza la psicología y la cultura como dos herramientas que se retroalimentan mutuamente. Por ello, actúa como facilitadora de integración a las personas que quieren adaptarse a otra cultura en tiempo récord para sacar el mejor rendimiento económico y personal durante su estancia en otra cultura. Asimismo, ayuda a parejas mixtas a superar barreras culturales que producen malos entendidos. Ha creado su propio modelo de trabajo inspirado en la Psicología Humanista y el respeto a los Derechos Humanos. Trabaja con expatriados, cooperantes internacionales, ONG, escuelas de negocios y universidades, diplomáticos, cónyuges de diplomáticos y familias de expatriados que necesitan orientación en una nueva cultura.